RAFAEL ORDOÑEZ

Nací en Aguilar de Campos, un pueblito de Valladolid. Pero con  seis meses me llevaron a Madrid. Crecí en el barrio de Carabanchel, donde jugaba y leía, donde coseché unos cuantos amigos, donde aprendí a vivir. Estudié Magisterio, aunque nunca ejercí como maestro.

En los 90 asistí a varios talleres sobre el arte de contar cuentos y llegué a formar, junto con otros soñadores, el grupo CHáCHARA Cuentacuentos.

Comenzamos a contar y contar y contar y contar…

Y a mí me dio por escribir. 

Contaba cuentos y escribía. Contaba y escribía y comía pipas de calabaza. Escribía y corregía y, a veces, me echaba a la siesta

En 2001 me dieron un premio literario, por una novela muy buena, y eso, quieras que no, anima mucho.

Y después de unos cuantos libros, entre poemas y adivinanzas, tortillas de patatas, cuentos y risas, caricias y teatro y, sobre todo, amigos, buenos amigos, sigo disfrutando de la vida.

En Amigos de papel me estreno con El sol tiene frío